El lanzamiento de La soga de los muertos fue como una fiesta familiar. Se notaba ese ambiente de amistad de los conocidos de siempre. Estaba Felipe Arratia, Manuel Maira, Diego Zúñiga, Francisco Ortega, Álvaro Bisama, Mike Wilson, Camilo Salas, Luc Gajardo y muchísima gente más que lamentablemente no conozco. Lamentable porque de verdad se sentía ese ambiente característico de una gran familia (incluyendo, claro, la familia sanguínea de Antonio, la que –como era de esperar- acudió en masa a la sala habilitada por la universidad Diego Portales).
Por Cristian Ortega Puppo
Patricio Jara y Héctor Soto fueron los encargados de acompañar a Díaz Oliva, y ambos se mostraron sorprendidos de que los hayan escogido para este importante momento. ¿Por qué los eligió Díaz Oliva? ¿Por qué se elige a una u otra persona para lanzar el libro que escribí? Difícil. Patricio Jara contó que lo que iba a leer fue escrito en un camarín el día anterior. Héctor Soto declaró que no conocía mayormente a Antonio, pero que tenía muy buenas referencia entregadas por Alberto Fuguet. Incluso dijo que Fuguet debería estar presentando la novela, no él. Quizás.
Antonio tomó el libro y se puso a leer algunas páginas. Sentado como cabro chico, sin nervios, como leyéndole por primera vez a su familia (en este caso a su gran familia). Todos con respetuoso silencio. Todos con necesidad de leer el libro pronto. Leer lo que el hermano chico acaba de escribir.
El momento de tomar una copa de vino y de firmar los libros llegó. Se armó una buena fila para conseguir una dedicatoria. Antonio con una risa nerviosa (entre descolocada y sorprendida) firma y escucha los comentarios de sus lectores. A muchos los saluda como amigos del alma. Sin duda lo son. Pasan casi treinta minutos y ya quieren cerrar la sala, pero no pueden. La firma continúa y tiene para rato. Antonio se ve feliz con su gente. Con su nuevo libro. Del que, como dijo Pato Jara, es su primer libro de ficción publicado, pero no el primero de ficción escrito. Se nota por los riesgos en los que se sumerge para desarrollar la trama.
Salgo y la gente está en el pasillo, con una copa de vino en la mano derecha y la gran mayoría con el nuevo libro publicado por Alfaguara en la izquierda. Como un trofeo, un título. Antonio sigue dentro de la sala, perdió la noción del tiempo. Está conversando sobre cualquier cosa. Escuchando una historia de que tal persona no pudo venir, pero le mandó muchos saludos y felicitaciones. Y le podrían contar lo que sea, Antonio está feliz.